La elaboración de nuestros vinos comienza desde el mismo viñedo. Durante los meses de agosto y septiembre se realizan controles de maduración del total de 40 Has. de viñedo propio.
En el momento de comenzar la vendimia se conocen las viñas que van a formar parte de cada uno de nuestros vinos, Tinto joven, vinos destinados a crianza etc. La fermentación alcohólica se realiza en depósitos de acero inoxidable de 30.000 kg de capacidad, cada uno de los cuales dispone de su propia bomba para poder realizar remontados diarios espaciados a lo largo del día.
El control de la temperatura, tan importante durante todo el proceso de elaboración, esta automatizado. Todos los depósitos disponen de un sistema de camisas, para poder enfriar o calentar el mosto o vino: para la maceraciones en frió, antes de comenzar la fermentación alcohólica o aplicación de calor para activar la fermentación maloláctica.
Una característica muy positiva de nuestra bodega es la entrada de uva a la bodega por encima de la cota de la boca de los depósitos. De esta manera el llenado de los depósitos es por gravedad, evitando incómodas bombas de por medio.
Una vez encubado el depósito, se realizan maceraciones en frío de 3-4 días para una mayor extracción de aromas y materia colorante. Además se realizan maceraciones posteriores a la fermentación alcohólica, en aquellos depósitos cuyos vinos lo requieran, como los destinados a Crianza o Vinos de Autor. El total de días hasta en descube y posterior prensado pueden ser desde 10 días hasta 28-30 días.
Además durante la elaboración de los vinos, en función de las condiciones de cada vendimia y según el criterio del enólogo se realizan distintas técnicas para potenciar los vinos, como: Elaboraciones de doble pasta, microoxigenación, delestage, sangrados...
El momento del descube se realiza con una concentración de azucares menor a 4 g/l. El vino de yema se separa del vino de prensa. La bodega dispone de una prensa neumática demembrana, cuyo primer prensado se separa del segundo, obteniendo así tres calidades de vino.
Una vez descubados los depósitos, se almacenan en depósitos de 30.000 L de capacidad para realizar la fermentación Maloláctica. Estos depósitos disponen también de camisas, por si fuera necesaria la aplicación de calor.
La incorporación del primer prensado se incorporará o no al vino de yema, según el criterio
del enólogo, el cual variará en función de cada vendimia.
Durante toda la elaboración del vino se llevan a cabo analíticas completas del estado del mosto/vino en cada momento. Los vinos destinados a crianza, se envejecerán en barricas de roble francésy americano con el fin de conseguir una mayor variedad de sabores y aromas para dar complejidad a nuestros vinos.