La rectificación del vino se encuentra muy ligada a la destilación. Por lo tanto, como paso previo, conviene hacer referencia a esta última. La destilación en genérico se realiza para separar ciertos componentes de una mezcla líquida. Esto se consigue mediante el control de la temperatura y la presión. Cuando la separación de esos componentes es más compleja y requiere realizarse en etapas sucesivas es cuando entra en juego la rectificación.
La rectificación del vino es una técnica que consiste en modificar sus características, de cara a enriquecerlo con los componentes que se desean. Para ello, se realiza una destilación con reflujo o un enriquecimiento con vapor. Es decir, se trata de un método por el que se puede separar el vino de sus componentes, de forma barata y eficaz.
Este tipo de operación, se conoce desde largo tiempo atrás. Antiguamente se realizaba para aumentar la concentración alcohólica del vino. Actualmente, el objetivo es otro, como se ha señalado previamente.