• ¿Qué esconden los vinos de Rioja Alavesa?

    Es voz común que a más del mediodía
    en ayunas la zorra iba cazando.
    Halla una parra, quedase mirando
    de la alta vid el fruto que pendía.
    Causábale mil ansias y congojas
    no alcanzar a las uvas con la garra,
    al mostrar a sus dientes la alta parra
    negros racimos entre verdes hojas.
    Miró, saltó y anduvo en probaduras;
    pero vio el imposible ya de fijo.
    Entonces fue cuando la zorra dijo:
    «¡No las quiero comer! ¡No están maduras!»
    No por eso te muestres impaciente
    si se te frustra, Fabio, algún intento;
    aplica bien el cuento
    y di: ¡No están maduras!, frescamente.

    Con esta extracción de la fábula infantil de Félix María de Samaniego, La Zorra y las uvas, iniciamos esta mini-guía, con la que pretendemos divulgar los aspectos generales del vino de Rioja Alavesa. Tanto para los amantes del vino de esta región, como para los que no lo son, es una oportunidad de lujo para adentrarse en este «mundillo», ampliar conocimientos y experimentar sensaciones sensoriales.

    Y es que, como no podría ser de otra forma, para conocer hay que probar. Con ello, cada cual irá identificando los sabores y aromas que más les gustan. En nuestro caso, tenemos claro que ¡nos encanta el vino de Rioja Alavesa, la región, las tradiciones y sus gentes!

    La región y sus municipios encantados

    Esta región del sur de Álava, se sitúa entre la Sierra de Cantabria y el río Ebro, a unos cuarenta kilómetros de su capital, Gazteiz. Apenas ocupa un 10% de la superficie del territorio alavés, pero cuenta con veintitrés núcleos de población, siendo Laguardia, la capital histórica política de Rioja Alavesa. Destacan también otras municipios de tamaño reducido, que albergan un gran encanto por su extensa tradición vinícola como Villabuena de Álava o Elciego, entre otros.

    Características diferenciales

    Su localización en una zona atlántico-mediterránea, la composición de sus suelos arcillo-calcáreos, la orientación sureña de los viñedos de la Sierra de Cantabria y su climatología seco y soleado, propician el correcto desarrollo de la vid. Si a ello añadimos el empleo de las técnicas de cultivo más cuidadosas, con ello se puede explicar que las vides se desarrollen en todo su esplendor.

    Las uvas

    La materia prima por excelencia para elaborar el vino de Rioja Alavesa es el Tempranillo.  También se emplean otras variedades como viura, para la elaboración de blancos, la garnacha o la malvasía. En Bodegas Zintzo, se emplea la uva tempranillo para los tintos y la viura para los blancos con denominación de origen-

    Los vinos

    El vino tinto es el producto estrella.  Para los vinos jóvenes se emplea el método tradicional de maceración carbónicaCon ello, se logran vinos afrutados y muy agradables en el paladar.

    Por su parte, en los vinos de crianza mayoría de los casos se emplea la fermentación maloláctica y es necesario un tiempo de envejecimiento en barrica. Dicho tiempo es variable en función de la denominación de crianza, reserva o gran reserva que se le desee otorgar al vino.

    Tradiciones ligadas al vino

    Esta región de Euskadi muestra una gran tradición milenaria ligada al vino. Muchos escritos y bodegas subterráneas lo dejan patente.

    Por eso, hoy en día se siguen celebrando numerosas fiestas que conmemoran el lugar privilegiado que ocupa el vino para esta región. Y es que en la Rioja Alavesa nos gusta festejar, pero destacaríamos la Fiesta de la vendimia y la Fiesta de Acción de gracias de la vendimia. La primera celebrará su 23 edición el 18 de Septiembre en Samaniego y la segunda tendrá lugar a mediados de Noviembre en Labastida, ¿no pintan mal verdad?

    Nos hemos centrado en el mundo del vino, pero no queremos olvidarnos de todo el patrimonio cultural de la Región. Con todo ello, sobran las razones para dejarse pasar por la Rioja Alavesa, ¡no dejes que te lo cuenten y conoce todos sus secretos de primera mano!

     

  • El vino blanco para saborear el verano

    A muchos, siempre que se habla de vino de rioja, lo primero que se le viene a la cabeza es un vino tinto joven o crianza, vinos equilibrados y complejos tan apreciados por los bebedores de vino. Pero, ¿qué me decís del vino blanco? En muchos casos parece el gran olvidado de esta denominación.

    ¿Cuántos habéis oído en alguna ocasión la afirmación «El mejor blanco es un buen tinto«? Durante mucho tiempo el blanco era considerado como una mera anécdota en la elaboración de vinos de Rioja. Afortunadamente esa mentalidad está desapareciendo. Los amantes del vino aprecian ya estos vinos, con personalidad propia.

    Pero ya se sabe, «para gustos, los colores«. Hay a quienes les encantan los vinos blancos, y los que se definen como más de tintos. Tanto para los primeros, como para los segundos, nos parece una época excelente para no dejar escapar la oportunidad de probar el vino blanco. El verano, representa la atmósfera ideal para disfrutar de una bebida fresca en un ambiente agradable, distendido y relajado.

    Con el vino blanco podréis combatir las altas temperaturas, durante el «hamaiketako», comida o cena. Ya sabéis, ¡cualquier momento es bueno! Y además, podéis combinarlo a la perfección con recetas de nuestra gastronomía. Rompiendo los paradigmas establecidos, no se consigue el maridaje perfecto de este vino únicamente con los mariscos y pescados. Y es que el vino blanco casi siempre será una buena opción para toda comida. Su versatilidad, polivalencia y frescura, limpian el paladar para que podamos disfrutar de todos los sabores.

    Por supuesto, nuestra recomendación, no podía ser otra que el vino blanco Zintzo. Intensamente aromáticofresco, dejará en el paladar una intensa sensación frutal.  Para su elaboración, se emplea la maceración en frío durante dos días y posterior fermentación durante una quincena a temperatura controlada en tanques de acero inoxidable. Y después de todo ese trabajo que se esconde por detrás, servido a 7-8 ºC, como debe ser el caso, dejar a vuestros sentidos actuar y que perciban todas sus cualidades.

    Por lo tanto, os animamos a que os dejéis seducir por este vino y ya después de tanta «palabrería» solo queda una cosa, ¡disfrutad del vino blanco y por supuesto, del verano, que van de la mano!

  • Elaboración de vinos tintos y blancos de Rioja Alavesa

    El proceso de elaboración de los vinos tintos y blancos de Rioja Alavesa es diferente. Veremos cuáles esos puntos divergentes más representativos, apoyándonos en el proceso de elaboración de estos vinos de Bodegas Zintzo.

    Decir que La Rioja Alavesa es tierra de vinos no es ninguna banalidad. Hablar de esta comarca es hablar de una historia dedicada al vino desde hace más de 2.000 años. Su clima y la riqueza de sus tierras, junto al buen hacer de sus gentes, han permitido que los vinos de Rioja sean reconocidos internacionalmente.

    Desde la Denominación de Origen se está haciendo una fuerte apuesta por potenciar y dar a conocer los vinos blancos. Vinos que han ido perdiendo protagonismo a pesar de la larga tradición de producción vinícola de la comarca.

    Tinto o blanco, el vino de La Rioja Alavesa es un vino con personalidad. La perfecta unión de los métodos más tradicionales y las más modernas tecnologías.

    Nos referimos a vinos muy apreciados, pero ¿conocemos qué diferencias de elaboración que existen entre los blancos y tintos?

    Los vinos blancos que se producen en las Bodegas Zintzo están elaborados con uva viura. Esta es el tipo de uva blanca más cultivada en la Rioja Alavesa. Es una uva que produce vinos muy afrutados y equilibrados y con aromas florales y cierto punto de acidez. El vino blanco viura es un vino con poca graduación alcohólica (entre el 9 y 10,5 %) y elaborado para ser un vino joven de rápido consumo.

    La uva tempranillo es la protagonista de los vinos tintos de las Bodegas Zintzo. Se considera la uva autóctona de la Rioja Alavesa y la que más superficie de cultivo ocupa. Es una uva muy versátil y que produce vinos jóvenes muy apreciados y con buen envejecimiento y mayor graduación alcohólica que los blancos.

    Las principales diferencias en la elaboración de los vinos tintos y blancos, además de la propia uva empleada, residen en cómo se realiza la fermentación. La fermentación del vino blanco se desarrolla sobre el mosto limpio, por lo que previamente despalillamos y prensamos la uva blanca. Por el contrario, en el vino tinto tempranillo, no realizamos este procedimiento. La uva tinta se fermenta en contacto con las partes sólidas de la vendimia.

    Otra diferencia radica en la temperatura a la que se fermentan. Mientras que el mosto blanco se fermenta a unos 16º C durante unos 15 días, el tinto lo hace a 25-28º C.

    Los vinos Zintzo de crianza son envejecidos a lo largo de 12 meses en barrica de roble americano y francés. Y posteriormente, durante otros 6 meses más en botella antes de ser comercializados.

    Con sus rasgos comunes y diferencias de elaboración, tanto los vinos tintos como los blancos de La Rioja Alavesa son una apuesta por la calidad.  Estos vinos, elaborados con uvas autóctonas, son capaces de reflejar fielmente la esencia de esta tierra.